El 684 E, ya restaurado, en sus primeras pruebas |
Hoy Miguel Ángel, de nuevo contribuye con esta entrada en la que nos cuenta la restauración de un Ebro 684 E. A mí me ha encantado, el dominio que Miguel Ángel tiene de la palabra escrita es patente, el amor por la marca Ebro también resulta llamativo. ¡Qué ustedes lo disfruten!
ADQUISICIÓN
Y LA DECISIÓN DE SU RESTAURACIÓN
Decía
el poeta Eloy Sánchez Rosillo, de manera contundentemente y sentenciosa,
aquello de que muchos son los caminos que recorre un hombre hasta que encuentra
el lugar de su muerte, y que muchas son las personas que en su paso conoce por
avatares del destino. Un buen amigo, que comparte con Electromecánica
21 S.L. nuestra pasión y ensimismamiento hacia
la marca Ebro, nos avisa de que hay un tractor Ebro 684 E largo, que, si no
intervenimos, corría graves riesgos de acabar fundido en el soplete o vendido,
por piezas, por algún desguace buitrero.
Decidimos que había que intervenir: pagamos lo que se puede pagar por un vehículo en las condiciones en las que se hallaba este manteniéndole el pulso al tiempo. Pensemos que lleva más de 25 años parado, no le entran las marchas, bloque motor reventado por el agua, la bomba inyectora ha sido profanada y dejada a merced de los elementos, el alternador no se halla, la bomba hidráulica tándem no la tiene, ausencia de automático de arranque, no hay instalación eléctrica, todos los instrumentos están dañados, no tienen agujas, volante quebrado en el estriado central, aletas traseras podridas en la parte inferior, pintura dañada por la palomina y la restante, al margen de convivir en el mismo Ebro el rojo y el azul, pareciere que le hubieren dado una mano de la misma con una escobilla del váter... ¡Dantesco!
¿POR
QUÉ SALVARLO?
Llegando a nuestras instalaciones |
Era
una época en la que soñar, al menos, era una posibilidad. Alguien, con ese
tractor, podía tener aspiraciones y ser dueño de un sino y de una ilusión que,
como si se tratase de una brizna, motivaba un porvenir a intuir y por el que
luchar, a la vez que se aferraba a la sensación de poder, así como el rugido, que
brinda en todos sus resortes un Perkins de 6 cilindros vibrando en sus manos, y
descoyuntando la tierra por donde los hombres han pasado y hecho labor para
hacer patria.
Entrada a la antigua factoría |
¿POR
DÓNDE EMPEZAR?
Ficha técnica del Ebro 684 E
Motor: Perkins 6.305 de fabricación española; 6 cilindros; 5000 cm3; bomba rotativa. Potencia: Máxima 85 CV; homologada a la TDF: 78 CV. Batalla: 2240 mm. Precio del año 1973: 468.000 pesetas. Neumáticos: 7.50x16; 15x30. Altura total: 1690 mm
EMPIEZA EL PROCESO DE RESTAURACIÓN
Comenzamos
a desmontar el tractor entero pieza a pieza. Se desmonta el motor, se encamisa,
se le acopla un nuevo equipo motor a la vez que se le repara el bloque con
electrodo de fundición y otros materiales. Los conocimientos del personal de Electromecánica
21 S.L. y de nuestra oferta de recambio
Ebro, son claves. Se le acopla una nueva
bomba inyectora a la que se le ajusta el avance hasta dejar el motor fino en el
arranque y en el sonido; se cambian las toberas de los inyectores
Datos inyección: Avance de inyección en 25 grados; presión de
trabajo de inyectores: 125-165 Kg/cm2
Ahora
toca afanarse con el circuito de refrigeración; se cambia la pipa y la bomba de
agua, se limpia a conciencia el radiador y todo el circuito con productos a tal
fin.
Llega el embrague, se hacen los ajustes, modificaciones y sustitución de las piezas que son necesarias: plato de embrague, pulido de prensa. Idéntico quehacer con los frenos (esta unidad se fabrica en 1973 y los frenos son secos; en los años siguientes se montarían en baño de aceite)
En
el puente trasero y elevador se acometen las pertinentes maniobras de
reinserción de la bomba hidráulica tándem; se sustituyen latiguillos, mangueras
y gomas tóricas.
A
la caja de cambios se le da un repaso general y se sustituye la torreta
reductora de cambio y los rodamientos que fue menester por motivos evidentes y
prescriptivos.
Mientras
se realiza la instalación eléctrica, se manda el depósito a limpiar. En cuanto
a la instalación eléctrica, se cuenta con el saber hacer del especialista en
nuestra empresa, Nicolás García, que decide acoplar varias mejoras como la
colocación de la caja de fusibles en un lugar más accesible. Se cambian las
termisistencias, así como el alternador; se colocan pilotos y faros nuevos; se
sustituyen los relojes del cuadro de mandos.
En
cuanto al volante se acopla el de un Same que tiene un estriado compatible con
el del Ebro y se ejecutan correcciones en el sistema de dirección que tenía
daños severos (algún “ingeniero” había soldado el espárrago de la caja de
válvulas al timón de dirección ocasionando, además de que el tractor no girase, tenía daños irreversibles porque el calor de la soldadura
había deteriorado retenes y tóricas en el pistón hidráulico) Además, para solventar problemas que estos
modelos tuvieron, se decidió acoplar timón de dirección y pistón hidráulico
nuevos; implementación que se añade a la restauración de rótulas, casquillos y
manguetas y que unido al caudal de 16 litros de la dirección, se obtiene un
resultado óptimo, con una suavidad de dirección sin mácula.
Otra
etapa estuvo marcada por la sustitución de las aletas que estaban podridas. Y
llega el momento de la pintura. El proceso ha consistido en lijar y pulir las
superficies. Aplicación de una capa de imprimación y, por último, pintado de
chapas y carrocería en los colores corporativos de este modelo: azul y gris
plateado. A destacar que el cuerpo se pinta con pintura anticalórica y que difiere
ligeramente del plata-verdoso original.
PRUEBAS Y CONCLUSIONES
Conclusión:
Consideramos, más allá del cercenado que preludia y pauta la economía, haber
cumplido con nuestro proyecto inicial, haber salvado al tractor del
achatarramiento o la exportación, sin piedad de su historia, solamente guiado
por los sentimientos cainitas del dinero y sus derroteros agoreros y
destructores. Podemos afirmar que hemos salvado a un tractor Ebro; nos ha quedado
la satisfacción plena de haber podido enviarle a su inicial y legítimo dueño, a
sus 85 años, un vídeo con el restaurado y funcionamiento de la máquina, para
que pueda disfrutar, recordando, de sus pasos de antaño. En realidad, esta ha
sido la verdadera hazaña, a la par de lo que hemos aprendido, porque la vocación
primigenia es aprender.
Nos
encontramos lejos de los burócratas que bullen en los ministerios, los que
hipócritamente aprobaron esa Ley de achatarramiento, no para salvar vidas, sino
para condescender ante las grandes multinacionales, que se aseguran que todos
se vean obligados a consumir, independientemente de la escasa rentabilidad que
está teniendo el campo en un mundo global, asegurándose una red de consumo de
repuesto que sólo ellos pueden suministrar y que, además, tiene una dependencia
mecánica del Servicio Oficial casi absoluta por la electrónica y sus
complicaciones.
Estamos lejos de esa gente que toma decisiones alejados de la realidad con la que se lidia, cada día, en nuestros campos; un mundo que preludian y diseñan quienes desconocen a los hombres anónimos que se baten el cobre y se duelan día a día.
Queremos
estar cerca de los que, sabiendo que nunca ocuparán una línea en la historia, luchan
diariamente para que simplemente la vida siga su curso. Queremos poder escuchar
el corazón de la gente que frecuenta sus hogares y dejar testimonio que el
futuro, que se ha construido con la lucha presente, es todo lo que nos dejan
por delante como ejemplo y lucha ya no sólo contra los elementos, sino contra
las personas que deberían velar por sus intereses, pero que en realidad se
rigen por otro tipo de designios más caprichosos y comprometidos con otras
esferas del poder, lo crematístico y la mercadería de favores e intereses.